1
La mano herida es el caos
en un espejo de huesos rotos.
Dolor
Caos
La farmacia cerrada tras los anuncios
de cremas para alisar arrugas.
Belleza
Dolor
Una modelo sonriendo para apagar
el olor a medicina y a pastillas.
Dolor
Se asoma el dolor por la noche,
el dolor proletario y campesino,
el dolor del padre que sufre,
el dolor de la madre ausente,
el dolor de la hija, de esta hija;
mi dolor, su dolor y el de ella.
2
La mano duerme.
Ya hay pastillas,
unos polvos de sobre que huelen
a trastienda de farmacia oculta
detrás de las modelos sonrientes.
El yeso pesa
como un trozo de obra construida
sobre la piel morena atrapada.
Regresa el dolor
y mi miedo,
mi miedo a perder como perdí
tu yo inolvidable, mamá, tu yo...
Me agarro a la lucha,
a mi lucha,
a su lucha,
a tu lucha
porque sé que estás en esta lucha
de mis manos mojadas de lucha.
3
De ocho en ocho horas,
pastillas, sobres, pastillas,
la lucha que no cesa,
mis labios sellados por el miedo.
Pasan los días, semanas,
se acerca el día de la libertad
para la mano herida
y la veo salir como los pollos
que abandonan el huevo caducado...
Más lucha. Más dolor.
La mano sigue herida
y yo sigo en esta lucha mía
de la nada contra el tanto y el abismo.
